Han sido varios meses, pero por fin he terminado de ver Los
Soprano. Tenía mis dudas, las historias de mafiosos se me suelen
hacer pesadas, y mucho más si es una serie. Las series son largas,
en esta cada capítulo dura unos 40 minutos, lo que da para mucho.
Las series suelen ser sobre el día a día de los protagonistas, y
si la serie dura varios años, de la evolución de los personajes
principales. En los Soprano el protagonista absoluto es Tony Soprano,
un capo de la mafia que después va ascendiendo gracias a que su
padre y su tío fueron los jefes de la familia antes.
La gran diferencia que tiene esta serie de las películas de
mafiosos convencionales es que el propio formato de serie hace que en
lugar de ver de lleno algún suceso en concreto (por ejemplo, en “El
padrino” el argumento prácticamente solo toca el enfrentamiento
entre familias) se ve el día a día de los personajes. Por ejemplo,
vemos como en un capitulo hablan de un negocio, y unos capítulos
después como van ganando dinero de ello. La profundidad en este
aspecto está muy conseguida, en la mayoría de series no hay tal
profundidad ni atención a los detalles.
Otra cosa a destacar son las actuaciones, la gran mayoría muy
conseguidas, pero hay que destacar la del protagonista James
Gandolfini, verdaderamente magistral. Por la calidad de esta
actuación esta en un lugar muy privilegiado, donde están los
mejores actores actuales. En mi opinión su calidad y carisma es
comparable a la de Edward Norton, Morgan Freeman o Samuel L. Jackson.
El resto de personajes están perfectamente interpretados y
caracterizados. Tenemos a Christofer y Furio, los matones, Paulie,
Ralf y Pussy, los que llevan los negocios, Silvio, la mano derecha
del jefe… Todos estos personajes tienen un carisma y una evolución
muy buena, pero no se queda ahí la cosa. Están los hijos de Tony,
con una progresión simplemente bestial (en especial Anthony, las
últimas escenas que protagoniza son sobrecogedoras), amigos suyos
(lo que le dan una humanidad a Tony que casi nunca vemos a este tipo
de personajes), sus familiares…. Muy conseguidos.
Pero si hay algo que destaca por encima de todo, es la dirección
y el guión de David Chase. La historia es algo liosa por culpa de la
gran cantidad de personajes, pero la cuenta perfectamente. Las
situaciones que suele crear en ciertos capítulos son escalofriantes
(en especial los sueños de Tony), pero sobre todo, menudas muertes,
casi siempre a final de temporada. El guión siempre tiene algún as
guardado bajo la manga, que nos hace estar en tensión al final de
cada temporada, para acabar siempre con un finalazo, siendo el culmen
el final de la sexta y última temporada. Hay mucha gente que no lo
entiende, pero si lo entiendes (o alguien te lo explica) es
simplemente sublime.
En definitiva, ¿recomiendo esta serie? Si, un rotundo si. Te
guste o no las historias de mafiosos, tienes que verla. Pero si te
gustan…. Este es tu orgasmo. Ya sea por los finalazos, o por las
continuas referencias al cine del crimen organizado, es tu serie. Si
duda, de las mejores series de la historia.
Nota: 9’5/10
Te gustará si te gusto....
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