A pesar de tener aspecto de
chocolatina, en realidad se trata de unos barquillos recubiertos de
chocolate. Sin duda, la mejor baza del producto se basa en darnos lo
mejor de cada uno de sus dos ingredientes principales: lo crujiente
del barquillo y lo delicioso del chocolate. Para más inri, el
chocolate usado es con leche, lo que le aporta una suavidad que se
agradece, tanto en textura como en sabor.
El interior se rellena con una mezcla
de cacao y arroz inflado, otorgándole el toque (chistaco) crujiente extra que
le convierte en un producto no solo delicioso, sino agradable de
masticar. La espiral de su envase le da un toque (segundo chiste, estoy en racha) hipnótico que
no hace más que incrementar la magia de su ingestión, además del
añadido de no tener la típica pegatina de oferta en su frontal,
algo muy común en otros snacks de su misma índole.
Instantánea del mismo tokke que yo mismo he ingerido. |
Sin duda, se trata de uno de los
mejores snacks dulces del mercado. Por desgracia, su precio es algo
elevado (suele costar 0'85/1'30€ cada paquete con dos barritas), aunque
vale la pena dada su calidad.
Valoración final: Orgásmico
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