Se puede definir a STALKER con una sola palabra: ambientación. Ya está, hasta aquí la reseña.
Bueno, vale, concretaré un poco más. De buenas a primeras te sueltan en un lugar hostil, sin demasiadas explicaciones. Tienes tu arma, tus vendajes, tu mapa, y todas esas cosas que tienen los aventureros, pero no te explican mucho del lugar en el que estás, más allá de que estás en un lugar fuertemente contaminado por la radiación y que hay varias bandas luchando por los tesoros que ahí se esconden.
Sabrás que tienes que llegar a algún lugar, matar a los que ahí se encuentren, hacerte con lo que buscabas en ese lugar y a otra cosa. Lo que más me gusta del juego es que siempre es un viaje hacia lo desconocido: no sabes como es el sitio al que te diriges, no sabes si tendrás bastante munición, ni sabes con que te enfrentarás, ni como tendrás que enfrentarte.
Y precisamente en el desconocimiento del enemigo está la magia: por lo general te encontraras a más buscadores de tesoros, como tú. Pero hay que recordar que estamos en un lugar fuertemente afectado por la radiación, y tanto los animales como las personas se han visto afectados. No diré nada más por el riesgo de destripamiento argumental que supone, sólo diré que las apariciones de algunos enemigos son realmente espectaculares.
Gráficamente y sonoramente es una auténtica bestia, solo hay que ver la no adaptación a PS3/XBOX 360, ya que dichas consolas no estaban preparadas para mover semejante bestia, y estamos hablando de un juego de 2007. Puede que hoy en día palidezca comparado con Crysis, Battlefields y compañía, pero hay que recordar que se trata de un escenario enorme completamente abierto y con apenas tiempos de carga.
No diré mucho más porque hace ya varios años que lo jugué y no lo recuerdo tanto como me gustaría, pero de lo que no hay duda que se trata de uno de los mejores FPS que se ha publicado en los últimos años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario