jueves, 18 de julio de 2013

Crítica cinéfila - The Purge


Al enterarme de la premisa inicial de The Purge, evité leer o escuchar cualquier cosa sobre esta película, para de esa forma verla sabiendo lo mínimo posible. ¿La razón? Su planteamiento teatral (teatral en el sentido de tener un único escenario) y su planteamiento de terror sin monstruos ni poderes sobrenaturales me recordaban enormemente a Saw (la primera, por supuesto), película que me maravilló sobre todo por no saber nada de ella.


La historia cuenta lo siguiente: año 2022. En Estados Unidos el desempleo ha bajado al 1%, y prácticamente no hay crimen. ¿Cómo se ha conseguido esta proeza? Una noche al año hacen "La purga", en la cual el crimen será legal, incluido las violaciones y los asesinatos, a excepción de los funcionarios más importantes, a los cuales no se les está permitido asesinar. Gracias a esta purga, "los pobres" que no pueden costear su protección mueren, bajando de esa forma el desempleo y los gastos del gobierno en estas personas; y los psicópatas tienen una noche al año en la que poder desahogarse, de esa forma no causan problemas durante el resto del año.


La historia se centra en una familia que se ha hecho rica gracias a que el padre vende sistemas de seguridad para La purga. La familia, interpretados por Ethan Hawke (Gattaca, El señor de la guerra) y Lena Headey (300, Juego de tronos) como caras más conocidas, vive en la mejor casa de un lujoso barrio. Parece que la noche será tranquila para la familia protagonista, pero la cosa se complica cuando el hijo pequeño de la familia, el cual no comprende la violencia de La purga dada su corta edad, deja entrar en la casa a un vagabundo que está apunto de ser asesinado.

La idea es realmente buena, y está explicado con muchísima clase. Al comienzo de la película se toman todo el tiempo necesario para explicar como ha llegado a estar moralmente aceptada La purga, explicando como incluso la gente que no es violenta acepta La purga como algo necesario. Por desgracia, la sensación que me queda es que no ha caido en las manos adecuadas.

Seguramente por temas comerciales, se han visto obligados a meter la película en un género concreto para conseguir que hiciera taquilla (cosa que ha conseguido), y ese género ha sido el de terror, con todo lo que ello implica. No destriparé nada, pero hay multitud de momentos en los que parece que hay algún peligro, hay un silencio espectral, parece que no hay nada, y de repente, aparece el malo maloso de la nada. Que lo hagan una vez se puede perdonar. Que lo hagan dos ya no tanto. Pero si lo repiten una y otra vez ya mosquea.

Tranquilos, es mayor de edad, podéis amarla públicamente.
Si solo pasara esto, por mucho que lo odie (este tipo de escenas es la principal razón por la que casi nunca veo películas de terror), me seguiría pareciendo una película muy notable, pero por desgracia tiene otro de los tópicos del cine de terror: personajes que nos muestran como listos pero que hacen cosas estúpidas. ¿Eres una jovencita atractiva que está rodeado de violadores y asesinos que pueden actuar con impunidad? Te separas de tu familia, claro que si. ¿Un montón de maleantes van a entrar en tu casa? No paras de caminar y no cubres tu espalda, claro que si. ¿Estás buscando a alguien dentro de una casa y oyes disparos? No te mueves de donde estás y haces como que no has oído nada, claro que si.

A pesar de estos dos últimos párrafos, sigo pensando que The Purge es una película muy recomendable, sobre todo para los amantes de las distopías, aunque no tenga mucho que ver con otras películas distópicas. Pero la sensación que me queda es muy agridulce, ya podría haber sido una gran película y se queda en algo del montón, aunque del montón bueno.

Mejor escena: Los créditos iniciales, donde podemos oír como el país está mejorando, y a su vez vemos las salvajes imágenes de La purga.

Nota: 5/10


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