lunes, 17 de marzo de 2014

Crítica cinéfila - Dallas Buyers Club


Dallas Buyers Club tiene un objetivo muy claro: enseñar a la gente que no ha vivido en los 80 como afectó el SIDA y la razón por la que fue tan difícil encontrarle una solución, y a su vez, servir de crítica hacia la industria farmacéutica. Por ello, a pesar de contar con tan aclamadas interpretaciones (ambos ganadores de los Oscar a mejor interpretación masculina), en realidad, hubiera dado igual que intérpretes hubieran participado en la película.

El guión no es malo, para nada. La construcción de los dos protagonistas, en especial el personaje de Matthew McConaughey, es bastante buena. El problema es que no se sabe nada de sus vidas fuera de como les ha afectado el SIDA. No hay una verdadera evolución de personajes.


Técnicamente tampoco tiene ningún alarde en especial. Planos normales, sin ningún riesgo. Montaje estándar, sin ninguna floritura. Fotografía cumplidora, pero sin buscar ninguna panorámica espectacular. Vestuario bien escogido, nos lleva a los años 80 sin caer en el ridículo. Banda sonora ambientadora, sin más.

Indiscutiblemente, la línea que separa a ésta película de ser un tele-film de las 4 de la tarde a haber ganado 3 Oscars (atención, 3 Oscars, por encima de películas como 2001: Odisea en el espacio o Taxi Driver) son sus dos actores protagonistas: Matthew McConaughey y Jared Leto. Lo hacen muy bien, McConaughey consiguiendo que un homófobo, mujeriego, maleducado, mentiroso, borracho y drogadicto consiga dar pena, y Jared Leto hasta el punto de hacer pensar que el personaje transexual que interpreta parezca una mujer vestida de hombre en una escena en particular.


Pero claro, aquí viene el dilema de siempre: ¿realmente merecen haber ganado premios por hacer personajes que requieren adelgazar tanto y maquillarse? Si nos paramos a pensar, eso lo puede hacer cualquiera. ¿Hubieran tenido tantas alabanzas de haber hecho los mismos personajes pero con su aspecto habitual? Un rotundo no. Que grandes actores con grandes personajes como Leonardo DiCaprio o Michael Fassbender se han quedado sin premio este año, lo veo tremendamente injusto.

Dallas Buyers Club me ha gustado, aunque pueda no parecerlo. Me ha gustado para pasar la tarde, para aprender algo de historia, para ver unas buenas interpretaciones. No para darle premios y ni para considerarla como una de las mejores películas del año pasado.

Nota: 6/10


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