Los análisis de videojuegos se suelen dividen en secciones, por lo general, entre gráficos, sonido, duración, historia y jugabilidad. Algunas veces, tanto para bien como para mal, algunos análisis deberían tener una sección extra: lo que mola el juego en cuestión. Como se podrá suponer por su elevada posición en mi lista de videojuegos favoritos, Borderlands 2 es de los que molan mucho.
En el análisis que le dediqué en su salida ya lo dejo bien claro, pero para resumir, diré lo siguiente: en una misión, subes hasta la azotea de un edificio. Al terminar la misión, te dan dos opciones: bajar por las escaleras o saltar. Dudo mucho que alguien en este mundo haya elegido la primera opción.
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