Un anciano senil recibe una de las típicas cartas que dicen "ha ganado usted 1 millón de dólares", pero que todos sabemos que es una estafa. Sea por algún trauma infantil, sea por tener algún capricho secreto o sea simplemente por la avanzada edad, el pobre hombre realmente cree haber ganado ese dinero. Su mujer y su hijo mayor intentan hacerle entrar en razón, pero su hijo pequeño accede a llevarle y cobrar el premio, aunque sea simplemente para que deje ese fantasía de una vez.
Con esta sinopsis, el interés está claro: saber que pasará una vez lleguen "a recibir" el premio. Por desgracia, la película no tiene ritmo para ello. Lo primero que llama la atención es la fotografía en blanco y negro, y lo segundo que llama la atención es el poco uso de la tecnología. Si, la gente ve la televisión y van en coche, pero al no haber uso de móviles, ni una sola mención a internet y demás, la sensación que queda es que si esta película se hubiera rodado hace 30 o 40 años, hubiera sido exactamente igual, para lo bueno y para lo malo.
Lo bueno: le dan mucha importancia a las conversaciones, estando la mayoría de ellas muy bien escritas. No veremos que las frases tiene dobles sentidos ni nada similar, pero no se hace demasiado aburrido ver a la gente hablar. Otra cosa buena es que la cámara se está quieta mientras hablan, y no usan ese método tan molesto de cámara al hombro que está tan de moda, incluso en películas como ésta.
Lo malo: se podría cortar al menos 30 minutos de la película y no pasaría absolutamente nada. Por poner un ejemplo, veremos que van a un restaurante con karaoke, y una de las personas que cantan nombra a uno de los protagonistas. Este pasa un pequeño momento de vergüenza con ello. Y ya está, ese momento no tiene un impacto posterior, ya sea por algo que han dicho o haya pasado en el citado karaoke. No todas estas escenas son tan molestas, ya que en algunas hay algún que otro elemento de humor que ayuda mucho al ritmo, pero sea como sea no hace ningún bien este tipo de narración en una película con un argumento tan poco transcendental.
Lo que más destaca y por lo que más nominaciones a premios se está llevando (siendo esta la principal razón por la que me he interesado por la película) son las actuaciones. Will Forte está bien, y Bruce Dern hace un papel muy difícil. Eso, o realmente está senil. También me gustaría reseñar el papel de Bob Odenkirk, que aunque hace prácticamente el mismo personaje que hace en Breaking Bad, es un hombre que hace muy bien de pringado.
Poco más puedo decir. No me arrepiento de haber visto Nebraska, es una buena película, el tramo final es bastante interesante y me sirve para haber descubierto a un actor como Bruce Dern. Pero es larga y en ciertos momentos, aburrida. En resumen: no está mal, pero tampoco es como para tener las alabanzas que ha tenido.
Nota: 6'5/10
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